El e-commerce ya casi alcanza en España los 40.000 millones de euros, según datos publicados en 2019 por la CNMC. Esta cifra supone un aumento del 29% con respecto al año anterior, y las previsiones de crecimiento siguen en alza.

De hecho, son cada vez más los usuarios que optan por realizar sus compras por Internet: 7 de cada 10 personas de entre 16 y 65 años ya adquieren sus productos on line. En este contexto, ¿cómo lograr que los internautas depositen su confianza en tu e-commerce? A continuación, te mostramos siete estrategias infalibles para conseguirlo:

1. Diseño responsive. Se calcula que en 2021, un 54% de las compras on line se realizarán a través del teléfono móvil. Por eso es clave que tu página de e-commerce esté adaptada para funcionar con cualquier pantalla de un smartphone.

2. Reseñas de clientes. ¿Le darías tu teléfono a un extraño? Eso es lo que le ocurre a la mayoría de usuarios a la hora de hacer las compras por Internet: no se fían. De hecho, el 74% de los internautas se sienten incómodos al dar datos financieros. Por eso, opta por recopilar las opiniones de tus clientes (si usas la imagen de un famoso, mucho mejor) y ubícalas en un lugar bien visible de tu web. El testimonio de los otros te dará más credibilidad.

3. El precio justo. A la hora de poner un precio a tu producto o servicio, intenta que la cifra no resulte descabellada: ni demasiado baja (genera desconfianza), ni demasiado alta. Consulta las tarifas de tu competencia y muévete en un rango similar. Quizás te sirva este dato: el gasto medio del comprador on line es de 64€ por cada compra.

4. Cuida tu imagen. Para facilitar la confianza con tu público, cuida el diseño de tu web: que sea actual y operativo (fácil de usar). Y cuida también las imágenes, que sean de calidad, y la escritura. La convicción es frágil y se puede quebrar con un simple link roto o con una palabra mal dicha.

5. Asistencia virtual. Si incluyes un chatbot para dar información o para resolver dudas frecuentes, tendrás muchas más garantías de que se efectúe una compra on line: de hecho, el 54% de los internautas afirma haber formalizado compras gracias a la ayuda de un asistente virtual.

6. Una empresa consistente. Demuestra que tu marca es una apuesta segura, un proyecto consistente del que no se puede desconfiar. Un buen aliado para hacerlo son las redes sociales, donde la actualización constante de contenidos jugará a tu favor. Además, no dudes en publicar datos de la empresa (un correo electrónico, un teléfono o una dirección postal), para que el usuario sepa a quien recurrir en caso de duda.

7. Distintas formas de pago. Dar diferentes opciones para realizar el pago en un e-commerce aportará más fiabilidad y comodidad a tus clientes. Además de las tarjetas bancarias, estudia incluir otros sistemas como PayPal o Google Pal; o incluir el pago contra rembolso, que además permite comprobar la calidad del producto antes de abonarlo. Otras vías posibles son: las transferencias bancarias, los pagos on line a través del móvil (con plataformas como Bizum o Verse), o aceptar monedas virtuales como el bitcoin.