¿Mobile responsive o mobile first? Retrocedamos tres años atrás.

A finales de 2016, la navegación en Internet vivió un momento clave: la cantidad de usuarios que se conectaban desde dispositivos móviles superó por primera vez en la historia a aquellas consultas realizadas desde un ordenador de escritorio.

El teléfono móvil se imponía y por eso el diseño de las páginas webs empezó a demandar más protagonismo de las pantallas de los smartphones. ¿Tu web es “mobile responsive”?, fue la pregunta que surgió en voz alta. Es decir: ¿es cómodo navegar por tu página desde un teléfono móvil?

Google ya se había adelantado en 2015 penalizando a todas aquellas webs sin responsive: es decir, aquellas que tenían la letra demasiado pequeña o ilegible, que incluían software poco común en dispositivos móviles (como Flash) o si los links estaban demasiado cerca y no permitían clicar con comodidad al usuario.

Mobile first: el diseño web empieza en el móvil

Pero lo mobile ha dado la vuelta a tortilla. Antes los desarrolladores diseñaban en primer lugar una web de escritorio y luego la adaptaban para que pudiera verse correctamente desde una pantalla más reducida.

Las webs mobile first van más allá: en una evolución lógica, se crean directamente pensando en el móvil y luego se adapta para ser vista en un ordenador.

¿Cómo debe ser una web mobile friendly?

Las webs que estén preparadas para los dispositivos móviles deberán fijarse en el tamaño de su contenido, en su velocidad de carga o en la experiencia de navegación que ofrecen al usuario. Una web mobile friendly deberá prestar atención a:

    • El tamaño grande de la fuente: para que el usuario no tenga que hacer zoom al leer el contenido.
    • Sin softwares extras: es recomendable evitar algunas tecnologías que son poco comunes en los móviles.
    • Los formularios amigables: incluir formatos que pueda rellenarse de forma sencilla.
    • Los blancos y los espacios entre párrafos: que dejen respirar a la web para que el usuario pueda navegar con comodidad.
    • Los botones y los links: deberán ser grandes y estar ubicados en lugares fáciles de clicar.
    • Pop ups pequeños: que no interfieran con la lectura (google ya ha empezado a penalizar a las webs que muestran ventanas emergentes incómodas).
    • Menos peso: los contenidos de la web deberán tener un tamaño reducido para permitir que se cargue rápidamente (un 53% de los usuarios abandona una web si tarda más de 3 segundos en cargarse).

La creación de webs diseñadas especialmente para móviles gana fuerza por un argumento incontestable: casi el 40% de las compras se realizan en la actualidad a través de los smartphones. El mobile first el diseño del futuro.  ¿Por qué?

Ya se ha demostrado que cualquier proyecto on line debe tener en cuenta el diseño web para móviles y para tablets. Los expertos calculan que para el año 2021, el tráfico global de datos móviles se quintuplicará: llegará a casi 49 exabytes. ¿Quién no querrá estar allí?